miércoles, 1 de septiembre de 2010

EL ÚNICO VOS, EL DE ESOS OJOS






01 septiembre 2010
POEMA PARA EL ÚNICO VOS, EL DE ESOS OJOS

EL ÚNICO VOS, EL DE ESOS OJOS

Los ojos negros se hunden en mí y suelen prenderse con la ternura de una lámpara de aceite tibio titilando bordes de oscuridades, símbolos de derrumbar muros cuándo soy vulnerable a cualquier hora que empieza el alba. Los ojos negros me llevaban por el mundo, por los indios, por los moros, por esa redondez dónde no hay límite de color en la pupilas.
Pero los tuyos son el azul bruto del mar más embravecido y el último celeste de la tarde antes de que se acabe el cielo, antes de girar sobre mis latidos cómo una noria incansable curando mis heridas.
Esa delicia de encontrarme en tu mirada que me hacen volver con la sed de mi propio sudario a empaparme con sólo el rumor del agua tuya.
Esos que me hacen una vez más despertarme con vos y hacer un poema acostado por saber que el sabor del pan sigue siendo el mismo.
Ojos azules, una mañana de estas salpicaré con besos algunos trazos negros detrás de tus pestañas y creeré entonces que estoy dando la vuelta al mundo. Al tuyo y al mío, amor.
Mercedes Sáenz

3 comentarios:

Caselo dijo...

Siglos sin visitarte y me encuentro estas palabras. El azul bruto del mar más embravecido y el último celeste de la tarde, son dos imágenes que nunca se podrán olvidar.

Un abrazo enorme

Carlos Eduardo

amelia arellano dijo...

Ay Merci, que palabras ponerle a esta sensación que me colma el estómago . Envidia , quizas???
Pero envidia de buena hierba, amiga.
Amelia

Avesdelcielo dijo...

Qué hermoso el amor sostenido en el tiempo. Es un deleite cómo describes los ojos que se unen en una misma mirada. ¡Bravo, Merci!
MARITA RAGOZZA